Por Ignacio García
ATLACHOLOAYA, Morelos.- La interna del Centro de Readaptación Social (Cereso) de Atlacholoaya, en Morelos, Rosaura Rebolledo Ocampo, interpuso un amparo para recibir atención médica por la diabetes avanzada que padece, así como hipertensión arterial y asma, debido a que se le había negado.
Por medio de una carta que redactó la interna, señaló que desde que el pasado 8 de junio solicitó la protección de las autoridades judiciales, ya que padece problemas de pie diabético que se le ha complicado y está en riesgo de perderlo, y sólo le concedieron la curación de la extremidad, pero convulsionó al elevarse nuevamente su presión arterial.
De acuerdo con la denunciante, fue ingresada al penal de Atlacholoaya el pasado 17 de diciembre de 2015 torturada y acusada del delito de secuestro, aunque padece enfermedades crónico degenerativas desde hace 15 años, por lo que ha sufrido complicaciones de salud por la falta de atención médica, aunado a que por la actual pandemia por el Covid-19 teme por su vida.
Agregó que por su condición de salud se le debe aplicar insulina dos veces al día para sobrevivir, por lo que solicitó que no se vulneren más sus derechos humanos, pues de lo contrario puede fallecer por esta enfermedad en el interior del centro de reclusión de Atlacholoaya.
Apenas ayer se recibió en la Oficina de Correspondencia Común de Juzgados de Distrito en el estado de Morelos con residencia en Cuernavaca el recurso de amparo por parte de la defensa legal de la denunciante para que se le brinden las condiciones médicas necesarias.
En el penal de Atlachoaloaya se han registrado constantes violaciones de derechos humanos a los internos, a quienes se les ha restringido los servicios médicos para quienes padecen algún tipo de enfermedad.
Rosaura Rebolledo Ocampo fue acusada de cobrar un pagaré de 13 mil pesos en la Tienda Electra, y sentenciada a 20 años de prisión el 17 de diciembre de 2015, con el expediente JOE/074/2016.
